Lagos en el corazón del Sahara
En el desierto del Sahara, en la extremadamente árida región del norte de Chad, Africa, donde la precipitación anual promedio escasamente sobrepasa los 2 milímetros, se encuentran los lagos de Unianga, sitio que comprende dieciocho lagos conexos entre sí que se hallan en la región de Enedi.
El complejo lacustre abarca una superficie de 62.808 hectáreas siendo el paisaje natural de una belleza excepcional.
Los lagos -salobres, hipersalobres y de agua dulce- se alimentan de aguas subterráneas formadas hace miles de años, cuando el clima era húmedo. A pesar del intenso calor y el alto porcentaje de evaporación, las fuentes de agua subterránea son lo suficientemente fuertes como para alimentar de agua a los lagos. Hace unos diez mil años en el área había solo un gran lago, pero ahora son dos conjuntos de lagos que distan 40 kilómetros entre sí.
El primer conjunto es el de Unianga Kebir, que cuenta con cuatro lagos. El más grande de ellos -el Lago Yoan- tiene 358 hectáreas de superficie y 27 metros de profundidad. En sus salobres aguas sólo viven algas y algunos microorganismos. Sus orillas están cubiertas de cristales de sal y está cercano a una aldea, en la que viven 9.000 personas.
El segundo grupo lacustre, llamado Unianga Serir, consta de 14 lagos separados entre sí por dunas. Casi la mitad de su superficie está cubierta por juncos flotantes que atenúan la evaporación de sus aguas. El mayor lago de este último conjunto es el Lago Telli, que tiene una superficie de 436 hectáreas, pero tan sólo 10 metros de profundidad. Biológicamente es el más importante y posee una variada fauna de agua dulce, con un oasis alrededor.
Como Unianga tiene una ubicación tan remota, sólo recibe unos quinientos turistas por año. Este año ingresó a la lista de patrimonio mundial de la Unesco.
El complejo lacustre abarca una superficie de 62.808 hectáreas siendo el paisaje natural de una belleza excepcional.
Los lagos -salobres, hipersalobres y de agua dulce- se alimentan de aguas subterráneas formadas hace miles de años, cuando el clima era húmedo. A pesar del intenso calor y el alto porcentaje de evaporación, las fuentes de agua subterránea son lo suficientemente fuertes como para alimentar de agua a los lagos. Hace unos diez mil años en el área había solo un gran lago, pero ahora son dos conjuntos de lagos que distan 40 kilómetros entre sí.
El primer conjunto es el de Unianga Kebir, que cuenta con cuatro lagos. El más grande de ellos -el Lago Yoan- tiene 358 hectáreas de superficie y 27 metros de profundidad. En sus salobres aguas sólo viven algas y algunos microorganismos. Sus orillas están cubiertas de cristales de sal y está cercano a una aldea, en la que viven 9.000 personas.
El segundo grupo lacustre, llamado Unianga Serir, consta de 14 lagos separados entre sí por dunas. Casi la mitad de su superficie está cubierta por juncos flotantes que atenúan la evaporación de sus aguas. El mayor lago de este último conjunto es el Lago Telli, que tiene una superficie de 436 hectáreas, pero tan sólo 10 metros de profundidad. Biológicamente es el más importante y posee una variada fauna de agua dulce, con un oasis alrededor.
Como Unianga tiene una ubicación tan remota, sólo recibe unos quinientos turistas por año. Este año ingresó a la lista de patrimonio mundial de la Unesco.
Fuente
0 comentarios en "Lagos en el corazón del Sahara"
Publicar un comentario