Un récord mundial
En noviembre 20 2004, Vitaly Kulikov, ruso de 28 años, llenó de hielo 800 globos en un racimo y estableció un nuevo Récord Guinness al elevarse hasta 5.724 m de altura.
El anterior récord lo tenía el inglés Ian Ashpole, que había llegado a los 3.350 m.
Aunque el evento tuvo lugar en condiciones climáticas extremas, fue todo un éxito. Había una terrible ventisca ese día y la velocidad del viento cerca del suelo era de más de 160 kph.
La física del proceso era clara y simple para Vitaly ya que él es un físico. Sólo necesitó realizar algunos cálculos y elegir los globos, que tenían que ser lo más fuertes y baratos que fuera posible. El mismo financió su proyecto y tuvo la ayuda de un equipo de quince personas que armaron su "aeronave" por más de seis horas. Cerca de cien globos volaron lejos.
El anterior récord lo tenía el inglés Ian Ashpole, que había llegado a los 3.350 m.
Aunque el evento tuvo lugar en condiciones climáticas extremas, fue todo un éxito. Había una terrible ventisca ese día y la velocidad del viento cerca del suelo era de más de 160 kph.
La física del proceso era clara y simple para Vitaly ya que él es un físico. Sólo necesitó realizar algunos cálculos y elegir los globos, que tenían que ser lo más fuertes y baratos que fuera posible. El mismo financió su proyecto y tuvo la ayuda de un equipo de quince personas que armaron su "aeronave" por más de seis horas. Cerca de cien globos volaron lejos.
Quince minutos después de comenzar, Vitaly alcanzó el techo de 5.740 m, fotografió el altímetro y empezó a descender.
En total pasó un poco más de media hora en el aire. Los globos fueron explotando gradualmente a diferentes alturas, a diferencia de los de Ian Ashpole (que eran de hidrógeno) que explotaron todos a la vez.
Fuente
En total pasó un poco más de media hora en el aire. Los globos fueron explotando gradualmente a diferentes alturas, a diferencia de los de Ian Ashpole (que eran de hidrógeno) que explotaron todos a la vez.
0 comentarios en "Un récord mundial"
Publicar un comentario