Amistad entre diferentes especies # 1

Si piensan que han visto todo respecto a la amistad entre especies, se equivocan. En su nuevo libro, "One Big Happy Family" (Una gran familia feliz), Lisa Rogak recoge las imágenes y las historias de cincuenta amistades entre especies diferentes que se unen para iluminar nuestra perspectiva acerca del mundo. ¡He aquí un vistazo!

El labrador amarillo y su patito

Daniel el patito apareció en el Castillo de Mountfitchet en Inglaterra, donde lo encontró el cuidador y su perro, Fred. El patito había perdido recientemente a su madre y se encontraba muy mal. Inmediatamente, Fred comenzó a lamer al pichón para limpiarlo, y los dos se hicieron inseparables.

La gata y su ardilla

Chestnut, una ardilla bebé, fue encontrado abandonado y muriendo por una mujer que llevaba a sus hijos a la escuela. La mujer recogió a la ardilla y lo llevó a su casa, donde se negó a comer. Su marido propuso entonces poner a la ardilla mezclada con la camada de gatitos que su gata acababa de tener. Por suerte, la ardilla encajó perfectamente y comenzó a amamantarse de mamá gata. Ahora es otro miembro saludable de la familia.

El boxer y su cabrita

Cuando una mamá cabra parió tres cabritos en Pennywell Farm Wildlife Center en el Reino Unido, las cosas no se veían bien para la más pequeña de la camada. Al ver ésto, la dueña comenzó enseguida a alimentar con biberón a la cabrita bebé, Lilly. Cuando el boxer de la señora, Billy, vio a la pequeña cabra, sus instintos paternales despertaron y empezó a limpiarla. Ahora los dos son inseparables, siguiendo uno al otro por todos lados y acurrucándose en la noche.

El border collie y sus chanchitos vietnamitas

En 1997, cuatro cerditos fueron dejados en el Hospital de Animales Blue Cross en el Reino Unido, luego de ser abandonados por su madre. Quien oficialmente da la bienvenida al hospital veterinario, un border collie llamado Mac, vio a los lechoncitos y de inmediato comenzó a lamerlos y acariciarlos.

El búho y su ansarino

Después de años de huevos fallidos, Gandolph el búho se ponía cada vez más frustrado y angustiado en el Centro de Cetrería del Noreste, en Escocia. Cuando un vecino le dio un huevo de ganso a John Barrie (la persona que dirige el centro), éste vio una oportunidad para aliviar la angustia de Gandolph. Hubo cierta preocupación, ya que muchos pájaros, los búhos en particular, ignoran o matan un huevo diferente de los propios. Pero no Gandolf: el huevo eclosionó y ella inmediatamente asumió el rol de madre del ansarino.

El braco alemán de pelo corto y su pichón de tecolote

Es milagroso que la historia de un perro de caza y un pájaro terminara tan bien. Cherub, un tecolote (también llamado autillo o mochuelo) de cara blanca , tenía sólo cuatro semanas de edad cuando llegó al Centro de Aves de Presa de Devon en Gran Bretaña. La fundadora del centro, Karen Andriunas, siempre es cuidadosa al presentar nuevas aves a su perra braco, Kiera, por razones obvias. Sin embargo, cuando Kiera conoció a Cherub, hicieron clic. Ahora Kiera no le saca el ojo al polluelo, e incluso se pone nerviosa cuando Karen y Cherub salen de casa sin ella.

El gran danés y su cervatillo

El Secret World Wildlife Rescue Center, un santuario y centro de rescate en Somerset, Inglaterra, acogió a una moribunda cervatilla de sólo días de edad abandonada por su madre. Fue recibida por el perro del hijo del fundador del centro, un gran danés llamado Rocky, que inmediatamente comenzó a tratarla como si fuese suya. Rocky y la cervatilla, Cindy, rápidamente fueron inseparables, dando caminatas diarias y acariciándose con el hocico.

El pastor alemán cruza con Doberman y su bebé tejón

La historia de este tejón en realidad invlolucra a dos perros que se ocuparon de él. Cuando el primer perro encontró el tejón, huérfano y desnutrido en el campo, llevó cuidadosamente al cachorro con sus humanos. Al ver que el tejón necesitaba un cuidado especial, los humanos llevaron al tejón al Secret World Wildlife Rescue Animal Sanctuary. Allí, el tejón fue detectado por el perro residente del santuario, Murray, quien se hizo cargo del cachorro.

La foxhound y sus cachorros de zorro

Cuando una madre zorro problemática, conocida por haber abandonado sus camadas anteriores, quedó preñada de nuevo, el director del Centro de Conservación Zoológica LEO en Connecticut vio la oportunidad de salvar a un perro. Después de llamar al grupo de rescate Adopt-A-Dog, el perro perfecto fue encontrado: una perra de caza llamada Mama, que había llegado al refugio después de causar algunos contratiempos tratando de salvar cachorros callejeros. Ser una perra de caza la convertía en una candidata poco probable, pero su probado instinto maternal convenció al director de darle una oportunidad. La conexión no fue inmediata, pero con el tiempo empezó a limpiar y amar a los pequeños zorros.

La vaca y sus corderitos

Cuando la madre de estos dos corderos no pudo cumplir con su deber maternal, la pareja que dirigía una pequeña granja en Nueva Zelanda tuvo que tomar medidas. Presentaron a los corderos a Little Brown, y el trío se unió inmediatamente.

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